La estación también ofrece la ventaja de tener mucho sol y magníficos paisajes. Después de un buen día de esquí, puedes asistir a conciertos de música clásica en la iglesia, ver películas, visitar diversas exposiciones, ir a la biblioteca, echar un vistazo a la artesanía local ¡o montar en trineo! La estación cuenta además con bares y discotecas para los más fiesteros.
Cada día encontrarás una actividad deportiva, artística o cultural que hará inolvidable tu estancia, y eso durante toda la temporada. Y si eres un aficionado a escalar, tendrás a tu disposición una estructura artificial de escalada en interior de 64 m².